"Jean Cusset, ateo con excepción de las veces que escucha canto gregoriano, dio un nuevo sorbo a su martini —con dos aceitunas, como siempre— y dijo luego:
—Hay hombres que pretenden hablar en nombre de Dios. Eso los lleva luego a hablar por Dios, y acaban finalmente hablando como si fueran Dios. De esos hombres hay que huir como de la peste, pues en ellos encarna la soberbia, y la soberbia —aparte de ser de muy mal gusto— es la fuente de todos los pecados.
Nadie puede hablar en nombre de Dios. Únicamente la naturaleza puede arrogarse su representación.
Así dijo Jean Cusset. Y dio el último sorbo a su martini, con dos aceitunas, como siempre.
¡Hasta mañana!..."
Comparto esta reflexión con ustedes. El escritor, Armando Fuentes Aguirre, hace reflexiones muy interesantes acerca de la vida, de la religión, de tantas cosas. Comparto muchas de sus ideas y otras no tanto, pero cada que sale alguna que me agrada, queda bien grabada en mi memoria.
Creo que muchos de nosotros conocemos personas que se sienten superiores por pertenecer a algún grupo o ser parte de la comunidad de alguna Iglesia. Más aún, si se convierten en algo así como "la mano derecha" del sacerdote principal de dicha comunidad. Entonces llegan a cometer actos barbáricos a causa de esa misma soberbia que embarga sus almas. Incluso sé que más de alguno ha llegado a experimentar las malas actitudes en los mismos sacerdotes, no sé si es que se les suba el poder a la cabeza o de verdad se sientan taaaaaan elegidos por Dios que ellos mismos creen que son una autoridad a su nivel.
Un reflejo de la soberbia es la incapacidad de reconocer nuestros errores. Creemos que somos tan perfectos o que los demás están tan equivocados que es imposible que nosotros seamos los que metimos la pata. ¿Cuántas veces nos ha pasado que alguien nos regaña o nos llama la atención sobre algo que hicimos mal y negamos rotundamente que haya sido así, alegamos que nuestra intención era otra o simplemente nos cerramos a la opinión de la otra persona y nos enojamos y ya nadie nos saca de ahí? Eso, amigos míos, chiquillos y chiquillas, es soberbia. Y, verdaderamente, es la fuente de la mayoría de nuestros errores, digamos, de nuestros pecados. Creer que hasta Dios se equivoca y que el que nos quedemos con el cambio de lo que nos dio nuestra mamá para comprar mandados en la tienda no es robar; creer que copiar en los exámenes y que otros nos pasen sus tareas no es mentir; creer que criticar maliciosamente, burlarse de o maltratar a otras personas no es, en cierto sentido, "matar" a esa persona (sí, ya sé que no le estamos quitando la vida, pero se la hacemos más pesada).
Un lugar donde creo que se refleja más esa soberbia es en nuestras casas. Cuando nuestros papás nos dicen algo, nos regañan por algo o nos prohíben algo, creer que ellos no saben nada y que nosotros tenemos la razón y ellos no, que estos ya son otros tiempos y las situaciones no se deben tratar como antes, que si nos prohíben algo "están locos" y de todos modos lo hacemos, tantas veces sin darnos cuenta que si nos prohíben algo, si nos regañan por algo, si nos alejan de algo es por nuestro bien. Soberbia es creer que YO tengo la razón, que YO no me equivoco, que YO no estoy mal.
Creo que es hora de que veamos más allá de las intenciones de las personas que nos rodean. Es hora de aprender quiénes realmente están en nuestra vida para guiarnos, educarnos y hacernos compañía, y quiénes están en nuestra vida para pasar el rato, disfrutar o divertirse con (o sin) nosotros. Aprendamos, así, a escuchar a quienes verdaderamente debemos escuchar (nuestros padres, los maestros que realmente quieren enseñarnos algo, personas que sí saben de lo que están hablando aunque a nosotros no nos parezca o no compartamos su opinión). Hay que abrirnos a sus comentarios, y dejar de creer que siempre tenemos la razón.
are you sure?
Traducción:
Imagen "No siempre tengo la razón.. ¡pero nunca me equivoco!"
Abajo de la imagen: "¿estás seguro?"
Dejemos la soberbia fuera de nuestras vidas. Aprendamos a reconocer nuestros errores, a pedir perdón por nuestras faltas y a aceptar las opiniones de personas que realmente buscan lo mejor para nosotros. No nos equivoquemos de guías, no busquemos la luz en los lugares equivocados. Hay que ver que la mejor guía para hacer nuestras vidas mejores la encontraremos sólo en Cristo y sus enseñanzas, y ya sé que eso suena bien mafufo pero poco a poco iremos traduciendo sus enseñanzas a cosas que nosotros podemos aplicar en nuestra vida diaria.
Les pongo algunas citas bíblicas donde se menciona la soberbia:
“El fariseo, puesto en pie, oraba consigo mismo de esta manera: Dios, te doy gracias porque no soy como los otros hombres, ladrones, injustos, adúlteros, ni aun como este publicano; ayuno dos veces a la semana, doy diezmos de todo lo que gano” (Luc. 18:11-12).
Interpretación: Personas que nos creemos mucho porque oramos y vamos a misa, porque según nosotros nos portamos bien y seguimos las reglas, cuando en realidad no lo hacemos tan bien como pensamos.
Interpretación: Cuando nos creemos tan buenazos que nos encanta ver todo lo que los demás hacen mal sin fijarnos nunca en lo que nosotros hacemos mal. Recordemos siempre que alguien nos está observando, y nos observa porque quiere ver todo lo que hacemos bien, pero también ve todo lo que hacemos mal. Y ni siquiera tiene que ser esa la razón por la que lo hagamos: es simple sentido común.
“Porque el que se enaltece será humillado, y el que se humilla será enaltecido” (Mateo. 23:12).
Interpretación: Esta frase se oye muy "cielo e infierno", pero la neta está chida. No nos creamos tanto, no somos tan fregones. Seamos humildes: cuando hagamos algo bien, está bien sentirse bien con nosotros mismos, pero no está bien sentirnos mejores que otros "porque yo sí lo hice y tú no".
Interpretación: Esta frase se oye muy "cielo e infierno", pero la neta está chida. No nos creamos tanto, no somos tan fregones. Seamos humildes: cuando hagamos algo bien, está bien sentirse bien con nosotros mismos, pero no está bien sentirnos mejores que otros "porque yo sí lo hice y tú no".
Y ya, por el momento es todo, ya sáquense. : D
----MAYE
p.d.: Las interpretaciones son mías, están sujetas a cambio de opinión o qué tal si un día de estos me convierto al islam y ya no creo en eso (es broma eh!). Simplemente aclaro que todo esto es mi punto de vista, espero que lo compartan o si están en desacuerdo, pues háganlo saber y platicamos.
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